Quemando Dioptrías

Circunstancias personales, que no viene a cuento comentar aquí, me mantienen alejado de la discoteca particular, con lo que notarán más entradas extra-musicales en los últimos tiempos. No soy de los que escribe sobre música porque sí, me gusta rodearme de discos, revistas, fanzines y comprobar cada dato 5 veces antes de incluirlo...es la enfermedad de empaparse bien antes de compartir algo, entenderán que lo esté pasando mal. Prometo arreglar la anomalía y recuperar lo musical poco a poco, pero qué carajo, no vivimos de notas y melodías exclusivamente...vamos con algo de lectura, pues.
La revista The Continental anuncia nuevo número (el 17) para mediados de Abril. Con los alemanes Kilaueas en portada y amplio artículo de Dynotones. También repasan los trucos de grabación de Surfites, el festival Guitar Geek de este año o el regreso de Man or Astro-Man?. Como siempre, montones de reseñas y recomendac
iones y CD recopilando bandas de surf, instro y garage, entre ellos, cortes adelanto de nuevo disco de los alemanes Sidemen, The Barbary Coasters y los propios Kilaueas.

Dos títulos resaltan especialmente entre lo leído en la última quincena, el libro A la Cara, de Christa Faust
(Es pop Ediciones/Valdemar) y la novela gráfica El Cazador, de Darwin Cooke (Astiberri)
El primero es un relato adictivo que debería poner patas arriba la escena convencional del género negro y terminar con los prejuicios del lector habitual hacia éste tipo de relatos. Es un thriller sin serlo...pero encierra algo de drama cotidiano, de humor retorcido y mucha contundencia. No se me ocurre mejor introducción que la de la propia escritora:
"Me fascina el lado desagradable de la naturaleza humana. Desesperación. Traición. Avaricia. Obsesión. También me intrigan los matices grises. Gente buena que hace cosas horribles por motivos nobles. Gente mala que hace cosas nobles por motivos egoístas. Ese es el tipo de personajes que me interesan tanto como lectora como escritora."
Hace mucho tiempo que no devoraba 256 páginas con tanta fluidez y necesidad. Lean el adelanto en la web de la editorial y si no corren a conseguir su ejemplar para continuar la historia, es que tienen ustedes horchata en las venas...o viven lejos de una buena librería. Luego vendrá su adaptación al cine (la autora está trabajando en el guión actualmente) y todo el mundo descubrirá de lo que hablamos.

No dejamos el ambiente pulp ni la gran pantalla, porque El Cazador es la adaptación a viñetas de una de las novelas de Donald E. Westlake protagonizada por su personaje más famoso y longevo, Parker. Llevada al cine en varias ocasiones: A Quemarropa (1967) con Lee Marvin de prota y Payback (1999) con Mel Gibson en el papel principal, resulta aún más salvaje y violenta en su versión de narrativa gráfica. Con el trabajo visual tan retro del canadiense Cooke (responsable de joyas como Batman:Ego, DC: The New Frontier o Catwoman: El Gran Golpe) ver a un personaje tan visceral como Parker gana muchos enteros. La trama es simple, una venganza brutal y obsesiva. Le traicionó la mujer que amaba y su compañero de atraco aprovechó el botín para saldar una deuda con la Organización (llámalo mafia, compañía o lo que toque...). Él vuelve de prisión para recuperar lo que considera suyo y si es necesario arrasará con todo...una gozada sin tonterías, como debe ser.